Los orígenes de la masonería.
- RLS:. Círculus Acaciae

- 9 mar
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La masonería es una asociación de hombres y mujeres libres y de buenas costumbres, que se extiende en todas las naciones, culto ideal para la construcción moral del individuo y de la sociedad por medio del trabajo y ejercicio de la virtud. En un tiempo fue secreta, hoy, solamente es reservada y discreta, pues no tiene nada que no pueda decirse.
Los orígenes de la masonería históricamente operativa se remontan a la Edad Media, concretamente a los constructores de las grandes catedrales. La palabra masón proviene del francés antiguo y significa trabajador de la piedra o albañil ya que para construir una catedral se requería poseer amplios conocimientos como geometría, astrología, aritmética, etc; tomando en cuenta que, el contexto histórico en el que la gran mayoría de la población eran analfabetas.
La organización de estos constructores se mantenía oculta y las enseñanzas en grupos pequeños llamados cofradías y según su nivel de conocimiento eran puestos a trabajar en la construcción de las catedrales.
Seguían regulaciones estrictas, en las que no se admita a nadie fuera del gremio, estableciendo logias cerca de los sitios de construcción. Un inspector dirigía el trabajo, con un supervisor a cargo de cada diez trabajadores.
La transición de la masonería operativa a la especulativa fue un proceso gradual, en la que poco a poco se incorpora cualquier persona capaz de utilizar su intelecto y esfuerzo para estos fines, no exclusivamente los trabajadores de la construcción.
La historia más aceptada, es que para el siglo XVIII en Londres, existían cuatro Logias, que se reunían en posadas o tabernas, llamándose a sí mismos el precursor de La Nueva Masonería. 1717 se reúnen estas cuatro logias operativas en Londres el 24 de junio de 1717 (nacimiento de San Juan Bautista), que condujo a la creación de la Gran Logia de Londres. Esto marcó el comienzo de la masonería especulativa.
En 1723, James Anderson y Jean Théophile Désaguliers presentaron las Constituciones de Anderson, que reflejaban la condición de los masones especulativos, siguiendo la tradición de los masones operativos de siglos anteriores. Estas constituciones establecieron la historia de la masonería, las obligaciones de un masón y las regulaciones generales.
Durante el siglo XVII y principios del XVIII, las sociedades masónicas admitían miembros honorarios, llamados "masones aceptados", que no se dedicaban a la construcción. Estos nuevos miembros provocaron un cambio en las logias y su trabajo apuntó a construir ideas en lugar de cosas materiales.
Sin embargo, la historia puede rastrearse más atrás en el tiempo, en Roma, por ejemplo, en el 715 a.C., durante el reinado de Numa Pompilio, en la organización del imperio, quedó comprendido el gremio de Colegio de Constructores, Herreros y Forjadores. Integrados por hombres de todas las partes de Imperio, de todos los cultos, de todas las creencias y que proclamaban que todos los hombres eran hijos de un Dios de Clemencia y de Amor. Al ser aniquiladas las legiones de Roma Imperial, los Colegios se esparcieron por los reinos de Europa.
De igual manera, se considera a la masonería como heredera de los misterios Eulisianos, la sabiduría Egipcia (Hermetismo), esoterismo, Hebraico y Cristianismo (Antiguo Testamento, Cábala y Nuevo Testamento); Esoterismo Griego y Romano.
Tomando en cuenta que el espíritu del masón, que representa a un hombre fraternal, tolerante, no fanático y no dogmático que busca abrir la conciencia y el amor hacia el prójimo, desde que existen sobre la tierra hombres de corazón recto, de conciencia limpia y de inteligencia abierta, existe un masón.
Es por ello, que las actividades masónicas, existen desde que existen hombres y mujeres libres y de buenas costumbres. Por otro lado, toda organización requiere de ciertas bases que regulen su funcionamiento, la forma de actuar de sus miembros, establezca los objetivos de su organización, por tanto, La masonería, en su forma actual, se fundó en Inglaterra como se mencionó anteriormente.
La masonería si bien acepta en sus trabajos todo el simbolismo del arte de la construcción, siendo su fin moral, opera en el campo de la filosofía, práctica de la filantropía por medio del trabajo y del estudio y aspira al perfeccionamiento de la humanidad.
La Masonería es una institución de carácter iniciático, esto supone que los interesados en formar parte deben vivir una iniciación que los lleve a dar el primer paso a su interior en la construcción de “su catedral” de su templo interior y es que la encomienda que nos da esta Institución es elevar templos a la virtud y cavar pozos sin fondo a los vicios y bajas pasiones. De nada nos serviría portar insignias, adornos o textiles con símbolos masónicos, lo que hace a alguien masón es el cumplimiento de sus juramentos.
Bibliografía
El libro de la Francmosoneria. Serge Raynaud de la Ferriére.
El Tercer paso: La propagación de la luz. Melina Pirrone Traina
El primer paso: El descubrimiento de la luz. Melina Pirrone Traina
Extractado de. Pedro Álvarez Lázaro (Universidad Pontificia Comillas), "Origen, Evolución y Naturaleza de la masonería contemporánea", en Pedro Álvarez Lázaro (coord.), Maçonaria, egreja e liberalismo. Masonería, Iglesia y Liberalismo, Actas da Semana da Faculdade de Teologia, Porto, 1994, Porto-Madrid, 1996, pp. 33-46.





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